Antes de adquirir una vivienda, es recomendable conocer el abanico de posibilidades que ofrece cada tipo de inmueble. Desde que comenzamos a buscar, es normal tener una idea principal de lo que queremos. Pero una vez comparamos los tipos de viviendas, sus variaciones en los precios, las particularidades y la zona donde se sitúa, puede cambiar nuestra primera impresión. A continuación, resumiremos algunas de las diferentes características de los tipos de inmuebles que nos podemos encontrar en el mercado inmobiliario. Tanto por zona, diferencias de precios y la accesibilidad de los mismos.
Protegida. También conocidas como viviendas de protección oficial (VPO). Son de construcción reciente y han recibido financiación pública. Es el tipo de vivienda con los precios más económicos del mercado. Para conseguirlas se requiere cumplir unos requisitos que, según la comunidad autónoma, varían. Pero a su vez, comparte unos requisitos generales a nivel nacional: Para su adquisición tiene que ser la vivienda habitual, no puede tener una superficie superior a 90m² y dispone de un precio máximo de venta o alquiler.
Libre. Son la gran mayoría de las viviendas y se dividen en dos grandes bloques: Segunda mano y obra nueva. Sus precios son más altos que las viviendas protegidas y varían dependiendo de la demanda en la zona donde esté situado. En estos casos, no reciben ninguna ayuda oficial.
Segunda mano. Es la vivienda más común del mercado, conocida por todos, y la que tiene una mayor oferta. Aunque tenemos que tener en cuenta que si tiene menos de diez años se considera obra nueva. Su precio suele ser inferior al de una vivienda a estrenar y están en localizaciones asentadas, las podemos encontrar en cualquier barrio con sus servicios característicos. Por último, tienen la ventaja de poder reformarlos y adaptarlos al gusto de cada uno, además de ya tener disponibles los servicios de luz, agua y gas.
Obra nueva. Normalmente, y en comparación con uno de segunda mano, son inmuebles más caros. Su diseño es más moderno y atractivo, tanto en interiores como en exteriores, pero no suelen ser edificaciones céntricas en las principales ciudades. A su favor, cumplen las normativas más actuales de eficiencia energética y, en su mayoría, disponen de diferentes instalaciones de última generación: Aislamientos térmicos y acústicos en todas las zonas del hogar, domótica, LED, etc. En algunos casos se pueden recibir ayudas y subvenciones para su adquisición.
Como se puede comprobar, todas tienen sus ventajas e inconvenientes. En estos casos como agencia inmobiliaria, la opción más viable acaba siendo una vivienda de segunda mano, tanto por precio, particularidades, accesibilidad y con la oferta más amplia. Siempre priorizando las necesidades del cliente.
Diego Carluccio, Asesor de área en Bilbao de La Casa Agency
Monte Arno, S.L.