Opinión:
En muchas ocasiones, cuando vivimos o visitamos alguna ciudad, nos fijamos en una zona, en un barrio que nos llama la atención por las casas que tiene, el ambiente, la situación geográfica, etc. Y es que todas las ciudades tienen lugares más cotizados en los que muchas personas quieren tener una vivienda.
Siempre han existido barrios que están de moda o son más buscados a la hora de adquirir una vivienda. También conocemos la disponibilidad de estos, la alta demanda que tienen y sus precios. Estos factores son lo que hacen que encontrar una casa en una de las zonas TOP, con un presupuesto razonable y sin tener que esperar un período de tiempo demasiado extenso, sea complicado.
En estos casos, nuestro ideal se ve obligado a buscar una opción más factible, aunque no necesariamente peor. Se nos presenta la oportunidad de encontrar una vivienda que signifique una buena inversión, independientemente que sea para después alquilar, como para quedarte a vivir en ella.
Existen unas zonas denominadas barrios con proyección: son la mejor opción para realizar una inversión inmobiliaria, ya que ahora mismo están en auge, y disponen de numerosas viviendas disponibles, de buena calidad, en una buena localización, con varios medios de transporte, y a un precio más asequible. Esto se debe a que estos barrios no han pegado el boom que va a hacer revalorizar su precio, demanda y disponibilidad.
Hay aspectos que nos pueden servir como indicativos. Debemos valorar zonas donde se estén llevando a cabo nuevas construcciones o inversiones en la rehabilitación de espacios, conocer el plan urbanístico por parte de un experto en la zona puede ser clave. También su proximidad a numerosos servicios, desde colegios a centros comerciales, espacios verdes, acceso al transporte y otros puntos que toda persona valora a la hora de escoger su hogar.
Además, aunque todos queramos vivir en el barrio más de moda de cada ciudad, tenemos que tener en cuenta otros factores importantes que harán la decisión más fácil, como las dimensiones de la casa, los cambios que está viviendo esa zona, la expansión, crecimiento, etc.
Al final, lo más idóneo es poder contar con un buen análisis de la situación de mercado y, al abrir nuestro abanico de posibilidades, podemos conseguir que la compra de nuestro futuro hogar sea también una inversión interesante a futuro.
Por Aureli Sánchez de La Casa Agency (Sagrada Familia)